Motivarnos para el cambio!
El estudio de la motivación es desde varias décadas un tema central en psicología. A menudo se considera la motivación como un concepto unidimensional (estar o no motivad@) pero Deci et Ryan (1985) diferencian 2 tipos de motivación :
1. La motivación intrínseca - Está involucrada cuando se realiza una acción/actividad por el pueo placer y la satisfacción personal que nos genera (un ejemplo sería estudiar en la universidad para aprender, enriquecerse tal y como lo hacen muchas personas mayores). Este tipo de motivación pues se relaciona con las oportunidades de explorar, disfrutar, aprender, retarse, resolver problemas y desarrollar nuestro potencial.
2. La motivación extrínseca - Está dirigida a obtener recompensas externas o evitar castigos/sancciones externos. Ejemplos de este tipo de motivación serían el dinero, los halagos, el estatus social o la competitividad. La palabra clave aquí es el beneficio que se saca de una acción o de un comportamiento.
Los pilares que incrementan la motivación intrínseca son tres necesidades esenciales que tenemos todos a) la de autonomía, es decir sentir que las cosas vienen de uno mismo y de nadie o nada más.
b) la necesidad de competencia, cuando nos percibimos capaces de realizar tareas y eficaces.
c) la de pertenecer socialmente, que corresponde al sentimiento de sentirnos conectados y de formar parte de uno o varios grupos, colectivos, comunidades.
El motor de la motivación extrínseca es el beneficio que uno saca, y los estudios han demostrado que a menudo cuando la recompensa o el castigo desaparece, la motivación también. No obstante no siempre pasa así, una recompensa puede también incrementar la motivación intrínseca. Lo que muchas investigaciones han probado es que la motivación suele disminuir si se ofrece una recompensa a una persona intrínsecamente motivada por una actividad. En cambio si la recompensada es inesperada la motivación intrínseca no se verá afectada negativamente (obtener buenas notas en una asignatura de la que uno disfruta).
Pues, los dos tipos
de motivación tienen cada uno un papel importante y combinar las dos
motivaciones es lo mejor para llegar a una experiencia o realización óptima. Venga, todos podemos motivarnos para el cambio!
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