La dependencia emocional

Solemos asociar la adicción a las sustancias, el alcohol, los fármacos. Sin embargo, el DSM-5 (Asociación Americana de Psiquiatría, 2013 ) ha introducido cambios y avanza hacia la inclusión de las adicciones conductuales, por ejemplo el juego. Algunos autores han dado un paso más y sugieren incluir la dependencia emocional dentro de la nomenclatura de adicciones no relacionadas con sustancias. 

El comportamiento de una persona dependiente emocionalmente se define como adictivo, preso de una búsqueda permanente de cubrir las necesidades emocionales a través de otras personas. Se encuentran a menudo debatiéndose en una relación asimétrica con el sujeto del que dependen (pareja, compañero de trabajo...). Se caracterizan por buscar la aprobación de los demás, comportamientos de subordinación, una autoestima baja y un fuerte miedo al abandono y a la soledad. 

La dependencia emocional se relaciona con la ansiedad y la depresión, ataques de pánico, distorsiones cognitivas (como la idealización de otra persona o una visión hiper-romántica del amor) y puede llegar a la pérdida de identidad.

Amar demasiado es depender. Depender no es amar!